Tras aceptar su culpa y someterse a un procedimiento abreviado, el Tribunal Primero de Sentencia de la Capital, ha determinado sentenciar a 30 años de cárcel sin derecho a indulto a Roly Richard Solís Aroja, quien fue procesado por el delito de asesinato del súbdito brasileño Elías de Araujo Rodríguez. El hecho se habría suscitado al interior del penal de Morros Blancos en el mes de julio del 2019.
El fiscal del departamento de Tarija, Wilson Tito, ha informado que, se ha conseguido una sentencia condenatoria en contra de una persona que se encontraba en la cárcel pública cumpliendo una pena privativa por otro delito, sin embargo, con las pruebas suficientes recolectadas por el Ministerio Público se ha iniciado el juicio donde la defensa del procesado ha solicitado un procedimiento abreviado el cual fue concedido por el Tribunal.
“Estamos satisfechos con la sentencia condenatoria que se ha dado al sindicado, además por el trabajo que se realizó por parte de los fiscales quienes tenían pruebas contundentes para determinar el asesinato y al culpable”, ha añadido.
Recordar que el hecho se ha suscitado el 3 de julio de 2019 a horas 12:00 aproximadamente, a consecuencia de una pelea al interior del Centro Penitenciario de Morros Blancos del departamento de Tarija, donde se ha tenido que lamentar la muerte del privado de libertad, Elías de Araujo Rodríguez, de nacionalidad brasileña.
Se ha conocido mediante entrevistas realizadas en el lugar a otros reos que la causa probable es que ambos pelearon en el momento que el brasileño ha cambiado el canal de la televisión que había cerca de la lavandería, lo que molestó al agresor y con un arma punzocortante le realizó varias heridas que le llevaron a la muerte a la víctima.
El reo habría fallecido producto de múltiples heridas ocasionadas por un arma punzo cortante en la región abdominal que será corroborada por la autopsia de ley.
Dentro de las investigaciones realizadas se conoce que la víctima se encontraba con detención preventiva por el delito de robo agravado y fue trasladado desde el penal de Chonchocoro en septiembre del 2018.
