El departamento de Tarija es cuna de grandes cuentos y relatos, el chapaco es un conocido tejedor de historias hace a un lado el humor que le caracteriza para dar rienda suelta a la imaginación, vivencias o una combinación de ambas y así ir hilvanando interesantes historias que sobreviven generación tras generación.
Una de estas es la leyenda de “La Piedra Ombliguda de Motoví”, ubicada a la vera del río Motoví en la Reserva Nacional de Flora y Fauna de Tariquía, esta historia ha embelesado desde pequeños a los niños tarquiyeños. Para conocer bien la tradición se ha recurrido a Alejandra Nieves, una oriunda del lugar pero que actualmente reside en la ciudad de Tarija. Según la entrevistada esta piedra de casi tres metros de largo por un metro de ancho ha existido desde siempre y nunca ha pasado desapercibida.
“A todos nos causaba curiosidad y desde muy pequeños nos han contado la leyenda de La Piedra Ombliguda, se dice que es una piedra milagrosa que tiene una fuerte conexión lo desconocido y que permite proveer de lluvia a las comunidades, por este motivo la tradición hace que todos los niños pequeños en un número superior a 6 deben congregarse al amanecer y bañar el ombligo de la piedra, luego al retornar a casa esa misma noche siempre llueve, es el milagro de la piedra”, relata.
Este “ombligo” al que hace referencia Alejandra es una conformación natural en la misma piedra. Los pobladores aseguran que nadie nunca la tocó ni la trabajó, la piedra estuvo así desde siempre, otro aspecto llamativo es un caracol que se encuentra incrustado en la parte inferior derecha de la piedra, lo que lleva a suponer que se trata de una piedra de tipo sedimentaria pues durante la compactación y solidificación de los sedimentos del suelo este molusco quedó atrapado por siempre en su interior por lo que su edad puede superar los 100 millones de años dependiendo de la era en que se haya conformado este proceso.
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Asimismo se realizan misas a orillas del río para hacer pedido a La Piedra Ombliguda, quienes lo han realizado aseguran que es milagrosa y poderosa para todos aquellos que sepan encontrarla en las entrañas de la reserva de Tariquía. “Una de las preocupaciones que tenemos es que la piedra se hunda, antes era más alta y sobresaliente con los años se ha ido hundiendo algunos dicen que va a desaparecer y algunos tratan de cavar un poco pero como es difícil el acceso tenemos miedo que esta tradición pueda quedar sepultada para siempre”, señala.
Motoví es una de las 10 comunidades pertenecientes al distrito 8 del cantón de Tariquía de la Reserva Nacional de Flora y Fauna del mismo nombre dentro del municipio de Padcaya en la Provincia Arce, habitan en ella según datos del último censo 2012 del Instituto Nacional de Estadística alrededor de 150 personas es decir unas 30 familias.
El acceso hacia La Piedra Ombliguda no es nada facil, poder estar frente a frente con esta joya de la naturaleza cuesta recorrer casi 400 kilómetros por rutas bastante complicadas. Primero partiendo desde Tarija se debe ir hasta Padcaya, esto ronda mas o menos una hora de viaje dependiendo del tráfico.
De ahí se debe tomar el cruce por Orozas hacia Potrerillos en la comunidad de Pampa Grande, el servicio de transporte tiene hasta aquí un costo de 60 bolivianos luego se debe ingresar caminando unos 40 minutos hasta la pampa y encontrar la senda hacia Motoví que está a dos horas a caballo o dos horas y media haciendo senderismo con un ritmo medio – alto. A continuación se debe seguir el río Motoví y finalmente se logra avizorar la piedra que esta justo despues del puente colgante.
El visitante debe bajar la lomita por la que caminaba para poder llegar la famosa piedra. Una de las recomendaciones que hacen los guardaparques es realizar el ingreso siempre con un guía o conocedor de la zona para evitar que el visitante se pierda en el lugar, otra recomendación importante es llevar siempre una bolsa consigo para depositar la basura generada y no interferir con el medio ambiente de la reserva.
Otro consejo para quienes buscan llegar a la piedra y disfrutar de un día de pesca es aceptable por los guardaparques siempre que se haga solamente para el consumo del día y personal del visitante además del compromiso de recoger toda la preparación para la cocción de los pescados, está prohibido exceder los límites con la pesca ya que la mayor parte del año son los comunarios quienes mantienen a sus familias con este alimento y por eso se recomienda a los visitantes ser cautos e ingresar con mucha conciencia y respeto.
