Un ataque aéreo de Rusia sobre la ciudad ucraniana de Chernihiv el pasado 3 de marzo que mató a 47 civiles “puede constituir un crimen de guerra”, dijo este miércoles Amnistía Internacional (AI).
La organización pro derechos humanos ha investigado la caída de “múltiples bombas” al mediodía del jueves 3 de marzo sobre “la pequeña plaza pública formada por las calles Viacheslava Chornovola y Kruhova” de Chernihiv, que mataron a ciudadanos que hacían fila para comprar pan y dañaron gravemente los edificios cercanos.
Tras examinar los hechos, el equipo de Respuesta a las Crisis de AI indica que “lo más probable es que fuera un ataque aéreo ruso en el que se utilizaron al menos ocho bombas aéreas no guiadas, conocidas como ‘bombas tontas’”.
La Administración Regional de Chernihiv informó de que 47 personas (38 hombres y nueve mujeres) murieron en el ataque, señala Amnistía en su comunicado.