Diferentes acciones e investigaciones realizadas por la Defensoría del Pueblo evidenciaron la vulneración de los derechos de las mujeres y reflejaron diferentes problemáticas que enfrenta esta población, prioritariamente, en cuanto a la desprotección, sanción penal y reparación en casos de violencia.
Frente a ello, la Defensoría recomendó al Estado boliviano tomar acciones inmediatas y contundentes, asumiendo que la violencia hacia las mujeres es un problema estructural que requiere especial atención.
Observó que la vigencia del patriarcado en nuestro país dejó cifras alarmantes en lo que va de la gestión 2021: 98 feminicidios; 32.741 casos de violencia familiar o doméstica; 113 casos de violencia por día; 1.895 casos por violación; 1.765 casos de violación a niñas y adolescentes; 54 casos por acoso y violencia política, según datos de la Fiscalía General del Estado.
Otros datos que también preocupan, son las 177 mujeres que solicitaron una interrupción legal del embarazo por causa de una violación; 68 de cada 100 mujeres indican haber sufrido violencia obstétrica en el periodo de parto, según una encuesta de prevalencia, violencia contra la mujer, así como casos en los cuales se obliga a niñas a ser madres, en total aquiescencia del Estado.
Estos datos, según la Defensoría, reflejan la situación de la otra pandemia, aquella que a diario vulnera e impide a las mujeres desarrollar plenamente sus proyectos de vida y por la cual, este día en especial, se recuerda a las instancias competentes del Estado su obligación para desarrollar y adoptar todas las medidas necesarias para garantizar el acceso a la justicia, la sanción y no impunidad de hechos de violencia, además de la implementación de políticas públicas, en todos los niveles de Gobierno, para la garantía y ejercicio pleno de los derechos económicos, sociales, culturales y políticos de las mujeres.
Este 25 de noviembre, “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer”, la Defensoría del Pueblo exhorta al Estado boliviano, a todas las instituciones públicas, privadas y a la población en general, a tomar acción para la deconstrucción de comportamientos machistas y misóginos, para que todas las mujeres y en todos los ámbitos logren desarrollar íntegramente sus proyectos de vida, garantizando el derecho a una vida digna y libre de violencia. /Abi