Durante un encuentro con jóvenes universitarios en la Casa de la Cultura de Sucre, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, afirmó que restablecer las relaciones plenas de Bolivia con Estados Unidos “significa volver a la condición servil de ser una nación aplastada, intervenida y dominada desde fuera”.
“Es decir la relación plena (con EE.UU.) es que gobierne USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, por sus siglas en inglés) en cada uno de los ministerios, que decidan los planes ministeriales. La relación plena con los EE.UU. es la obediencia ciega al consenso de Washington para tratar de liquidar la economía del mercado interno”, señaló.
Además, comentó que el restablecimiento de las relaciones plenas con el país del norte significa a su vez el dominio de la DEA (Administración para el Control de Drogas, por sus siglas en inglés) sobre el territorio nacional “montado sobre la conducta servil de la policía” y que el Pentágono gobierne Bolivia a través de un grupo norteamericano “cabalgando sobre el cuello de los generales bolivianos”.
La conversación del titular de la Presidencia con estudiantes de la Universidad Mayor, Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, trató precisamente sobre las complicadas relaciones bilaterales entre Bolivia y Estados Unidos.
“Las relaciones plenas compañeros, compañeras, significa que el embajador norteamericano decida quiénes son los candidatos de un partido o de otro a partir de sus credenciales morales. Quien tiene que calificar la moralidad de los candidatos, tiene que ser la embajada norteamericana” explicó el Ministro.
Así también sostuvo que esa política haría que la CIA (Agencia Central de Inteligencia de EE.UU, por sus siglas en inglés) gobierne la vida de los bolivianos, invada su privacidad a través de los sistemas de inteligencia.
El 10 de septiembre de 2008, el presidente Evo Morales declaró “persona no grata” al entonces embajador de Estados Unidos Philip Goldberg, a quien acusó de conspirar contra su gobierno y de financiar a la oposición. En noviembre de ese mismo año expulsó a la DEA y en mayo de 2013 a USAID.
Entonces el Gobierno de George W. Busch respondió con la expulsión del embajador de Bolivia en EE.UU, Gustavo Guzmán.
Quintana se refirió al hecho de que el candidato por Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa y exvicepresidente de Gonzalo Sánchez de Lozada, anunció hace unas semanas que sería conveniente el restablecimiento de relaciones plenas con el país del norte en la condición de que Bolivia es un país pequeño.
“Reanudación plena de relaciones diplomáticas con Estados Unidos, como debe ser. Es por ahora el principal mercado de consumo. Es un despropósito mantener una casi ruptura con la primera potencia del mundo. ¿Dónde se ha visto una relación internacional de un país pequeño como Bolivia en el que si eres mi enemigo ideológico no te doy ninguna opción de comerciar?”, dijo Mesa el 27 de junio en una entrevista con El Deber Radio.
El ministro Quintana, al respecto dijo que contrariamente a la propuesta de Mesa, el Estado Plurinacional ha cambiado el contenido de la soberanía, de la dignidad y de la propiedad de los recursos naturales para construir otra sociedad y otra nación, lejos del tutelaje extranjero.
“Ese es el otro proyecto, el otro modelo, de que seamos los bolivianos libres, independientes, soberanos, para decidir nosotros mismos nuestro destino, para conocernos nosotros mismos, para superarnos. El otro proyecto (el de Mesa) es el de la domesticación, de la subordinación, de la dependencia o del tutelaje”, sentenció.
Por otro lado, pidió a los estudiantes hacer investigaciones y trabajos académicos sobre las relaciones que caracterizaron la historia entre Bolivia y Estados Unidos, esa relación de dominio, de sometimiento que ejerció la potencia del norte con Bolivia./abi