El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Arturo Alessandri, recordó el miércoles que cuando Carlos Mesa, en su calidad de vicepresidente, se alejó del Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, en octubre de 2003, ya se habían reportado al menos 61 muertos en la denominada «Guerra del Gas».
La autoridad recordó esa situación a propósito de la conmemoración de los 15 años de esos hechos luctuosos, cuando una represión militar contra civiles dejó el saldo de 67 muertos y más de 400 heridos.
«El señor Carlos Mesa cuando decide traicionar a su jefe, el 13 de octubre, ya tenía sobre sus hombros 61 muertos a los que había que sumar los 6 muertos de Warisata, entre ellos, 2 niños. No podríamos entender octubre sin recordar febrero y en febrero estamos hablando de otras 31 víctimas«, detalló en un acto público en la ciudad de El Alto.
Alessandri lamentó que -a su juicio- un genocida como Mesa ahora vuelva a ser protagonista en la política boliviana, sabiendo que traicionó al pueblo cuando asumió su mandato tras la renuncia de Sánchez de Lozada.
Recientemente, Mesa fue proclamado candidato a la presidencia por el Frente Revolucionario de Izquierda (FRI) para las elecciones generales de 2019.
«Bolivianos y bolivianas si vamos a olvidar lo ocurrido en octubre estamos condenando a nuestros hijos y nietos a repetir estas jornadas, no nos dejemos tomar el pelo con los genocidas de ayer que hoy día se tornan y se muestran como defensores de los derechos humanos«, señaló.
Recordó que la última traición de Mesa al pueblo fue cuando se negó a ser testigo en el juicio civil que instauraron ocho víctimas de octubre de 2003 en el juzgado de Florida, en Estados Unidos.
«Hablando con las víctimas de octubre, ellos nos recordaban que de manera insistente le han pedido al señor Carlos Mesa ser testigo en este juicio civil de Estados Unidos, pero la negativa de Carlos Mesa ha sido consistente, de tal manera que el resultado es el que todos sabemos«, sostuvo. /Abi
