Los integrantes y pilares de la banda son Sergio Marcelo Flores, Óscar Vargas y Franco Vargas que hace 18 años tocaban en diferentes escenarios ahora volvieron con toda la actitud rockera que caracteriza a los años 90, haciendo un contraste en el mundo del rock de la actualidad.
Marcelo explica que hace 18 años decidieron separarse por cuestiones profesionales y familiares, la vida laboral llegó y la música quedó a un lado, pero la pasión sigue por lo que ahora “van en serio”, con miras de incluso grabar su propio material.
“En el año 1994 como alcalde en ese entonces Never Krayasich organiza un concurso de rock donde yo estaba entrando a tocar guitarra y en mi promoción estaba Fernando Galarza, Horacio Aldana que actualmente son Cantares, entonces inicié en la guitarra con ellos, en las guitarreadas del Día de la Madre, de los profesores entre otros. Se lanza este concurso y ahí me dicen si quería hacer un grupo, ahí me separo del folclore y me voy al grupo de rock, porque yo tenía más la tendencia a rock”, explica Marcelo.
Con esa actitud y amor por el rock, Marcelo decide dejar el folclore de lado y emprende el camino del rock ya que en esa época recuerda era el auge de grupos como Maná, Soda Estéreo.
“Yo ya tenía un instinto para este instrumento, cuando tenía 9 años me armé una batería y jugábamos a hacer una especie de fonomímica, nos construíamos instrumentos, con temas de Los Pericos, Soda Estéreo todo el rock argentino que nos llegaba, poníamos juego de luces en una habitación, música a full y nosotros éramos los artistas”, dice entre risas.
Volviendo al concurso de rock, como dato interesante es que en ese concurso bautizaron la banda que hasta el día de hoy suena en los pubs de la ciudad, como Malditos Rock Band y en el concurso donde se presentaron lograron el triunfo de la mano de uno de los éxitos de Bob Dylan, Knockin’ on Heaven´s door, donde compitieron con los jóvenes integrantes de Electroshock.
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“El organizador nos decía ustedes los san luiseños no tienen nombre, ya van a entrar, van a entrar como Los Malditos, porque tocan malditamente, él hablaba así, nos presenta como Los Malditos, a mí personalmente no me gustaba el nombre pero pegaba, entonces nos bautizan como Los Malditos, tocamos las dos rondas y ganamos el concurso”, recuerda.
Con mucho cariño expresa el gran amor que siente por la batería, incluso la pelea que le dio poder tocarla ya que su profesor en ese entonces lo quería como guitarrista o trompetista.
“El día que me senté para tocar la batería no me levante más, era como si ya hubiese ensayado antes, era algo natural”, expresa.
Después de 18 largos años deciden emprender el camino de la música nuevamente, dejando claro el refrán de nunca es tarde para hacer lo que uno ama, con más de 40 años de edad son una banda que trae consigo sonidos finos y pulcros pero además una filosofía de vida vegetariana, no tomar bebidas alcohólicas, ni fumar.
«Estamos haciendo presentaciones como grupo invitado todavía porque estamos preparando unas 18 canciones para lanzarnos como grupo oficialmente, pero por el momento estamos teniendo un entrenamiento de campo, salimos a tocar a algunos pubs para conocer a los músicos que están alrededor nuestro», menciona.
Ahora con mucho cariño puede decir que tienen esposas flexibles y que les tienen confianza para dejarlos ir a ensayar, ya que volver a la vida de la música llega con muchas responsabilidades.
